Organizado por la Vicaría para la Pastoral y la Vicaría de Niños del arzobispado de Buenos Aires, el jueves 23 de diciembre por la noche se realizó en el Obelisco un Pesebre viviente con los niños en situación de calle de Plaza Constitución.
Los niños y sus familias habían partido por la tarde desde la parroquia Inmaculado Corazón de María, ubicada frente a la plaza.
La avenida 9 de Julio y su intersección con Corrientes fue suelo de la representación del Nacimiento santo, animada también por marionetas humanas que evocaban a Jesús, María, José, el Ángel Gabriel y los Reyes Magos.
Monseñor Vicente Bocalik, obispo auxiliar de Buenos Aires y vicario para la zona Centro, tuvo a su cargo la bendición al finalizar la representación y expresó: “Estas son cosas que tenemos que seguir fomentando. Encuentros nuevos en la calle. Salir al encuentro de la realidad de la pobreza, para proponer y que todos nos sintamos cercanos”.
Por su parte monseñor Eduardo García, también obispo auxiliar y vicario para la Pastoral porteña, expresó el deseo de que “así como Dios tuvo un gesto de ternura con la humanidad, que en esta Navidad tengamos un gesto de ternura con nuestros hermanos”. Durante la cena navideña que siguió a la recreación del Nacimiento de Cristo, el prelado subrayó que “este pesebre fue un pedazo del Reino. Los chicos de la calle, vestidos de angelitos, repartieron caramelos y alfajores a la gente que pasaba. Los que no tienen, dando a los que tienen”.
Fuente: AICA
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