La miel del desierto no proviene de un solo tipo de flores, por eso tanto Mateo como Marcos insistirán en considerar a la miel que comía san Juan Bautista como “silvestre” (cf. Mateo 3,4; Marcos 1,6). Resulta interesante también la cuestión de las langostas que, declaran ambos evangelistas, comía el Bautista. Sobre esto se ha especulado mucho con respecto a que en realidad comía vainas de algarroba disecadas, en forma de harina mezclada con miel, algo parecido al sabor de una tentadora torta de chocolate. Pero es muy improbable que esto fuera así por más atractiva que sea la interpretación y lógica a nuestro entendimiento. ¿Por qué? Bueno, la langosta y el grillo eran los únicos insectos permitidos para la alimentación por la Torah (cf. Levítico 11,20-23).
También es importante destacar que la langosta de tierra como alimento se ha consumido en diferentes lugares del mundo. Un dato interesante es que ha formado parte de la gastronomía andalusí, así como por supuesto la miel (un ingrediente infaltable de la cocina de los pueblos mediterráneos). Aunque es curioso que justamente los árabes de Al Ándalus prepararan estos insectos mezclándolos con miel y harina de algarrobas, siendo una excelente nutrición, entonces no queda tan disparatada la cuestión de las vainas de algarrobas pero como un ingrediente secundario, un aglutinante o sazonador. A esta altura creo que ya no debería sorprender la hermosa fotografía de la puesta de sol sobre el alcázar de la Alhambra, que tomé personalmente desde el monte Albaicín en Granada hace exactamente diez años atrás, la cual está en la presentación de este blog bajo su nombre: “miel y langostas”.
Luego de explicar este detalle, debemos entender que la Biblia habla de esta alimentación de Juan en relación a su ministerio profético, el cual fue muy corto, así lo señala la Sagrada Escritura y por medio de esta cuestión gastronómica podemos confirmar, ya que la abundancia de estos insectos en la región de los vados del Jordán entre Perea y Judea, parte del “desierto de Judá”, se daba estacionalmente. Asimismo, si escudriñamos en el griego “koiné” del Nuevo Testamento verificaremos que la palabra “akrís” se refiere (el nombre científico es “acrididae”), justamente, a insectos (cf. Apocalipsis 9,3.7) y no a vainas.
Ahora bien, estando en el libro del Apocalipsis, contemplo además que las langostas y la miel (cf. Apocalipsis 10,9-10) anticipan también el Dominio de Nuestro Señor por los siglos de los siglos en esa secuencia misteriosa que concluye en la Eucaristía del Cordero Triunfante con el Poder de Dios: “Te damos gracias (“eucharistoumen”), Señor, Dios Todopoderoso – el que es y el que era – porque has ejercido tu inmenso poder y has establecido tu Reino” (Apocalipsis 11,17).
¡Qué extraño caso ha resultado ser este! de la miel y las langostas a la Sagrada Eucaristía, que actualiza el Sacrificio de la Víctima digna y anticipa el retorno del Sumo Sacerdote fiel y misericordioso: Jesucristo.
!Adelante miel y langostas!
ResponderEliminarme alegra mucho este nuevo blog, me encanta todo lo que encuentro en El y la posibilidad de ir profundizando la Palabra de Dios teniendo en cuenta todo su contexto cultural e histórico.
ResponderEliminary gracias por ese paisaje del desierto, lugar de encuentro con el Señor. Y además me encanta el nombre del blog porque representa esa sobriedad y dulzura del espíritu que está despierto y lava los ojos cuando el corazón está pronto para buscar a Dios
Pertenezco al Café del abrazo literario y celebro la incorporación de este nuevo blog . El nombre me resultó sorprendente y la explicación acerca de él , muy interesante .
ResponderEliminarRoxana V . De Marchi
Qué cosa esto de la Palabra que cuanto más la leo más descubro! Es maravilloso! Espero que el Señor te siga dando el tiempo y el aliento para continuar propagandola Palabra en lo hondo de la Palabra.
ResponderEliminarNos vemos pronto, eso espero, antes que pase el tiempo delas langostas.
Te abrazo en mi corazón
Isabel de Radio María
Me pareció sorprendente el nombre " Miel y Langostas" pero más me sorprendió la explicación. Te deseo mucha suerte y ¡ ADELANTE!
ResponderEliminarMe encantó el nombre "Miel y langostas". Es poético y tiene un gran sentido evangélico. Te felicito y a seguir adelante...
ResponderEliminarMauricio
ResponderEliminarTe consulto como especialista en Antiguo Testamento. Soy abogado y estoy haciendo un trabajo para la especialización en derecho penal sobre el primer homicidio de la historia, el de Caín, como origen de la criminalística. Podes recomendarme algún texto?
Desde ya muchas gracias
Carlos LLera
carlosellera@gmail.com
pues. es una. buena. informacion
ResponderEliminar