Cuánta ganancia pecuniaria ha dado a su autor el “Código da Vinci” y sigue dando a muchos que elaboran todo tipo de análisis acerca de este libro que no vale la pena, escrito para regocijo de pseudointelectuales ignorantes, filosofastros de cafetín y paranoicos como el personaje que encarna Mel Gibson en la película “Teoría de la Conspiración”.
Pero esta cuestión posmodernista y transgresora, hija de los maestros de la sospecha, está a la orden del día en los medios de comunicación social, donde se presenta lo bizarro y chabacano vestido de alta costura con perfume francés, mostrando lo exitoso que se puede ser hablando y haciendo estupideces.
Lo grave, es que esta moda pérfida se fue extendiendo a algunos historiadores y a algunos biblistas, los cuales basados en el mismo modelo de ficción relativista y transgresor de la teoría de la conspiración, elaboran todo tipo de especulaciones teóricas basadas en cuestiones secretas indemostrables que no edifica la fe del Pueblo de Dios sino solo los bolsillos de quienes lucran suculentamente con este juego teorizador vestido de elegancia filosófica.
Por ejemplo: Puedo tomar el relato de la ascensión de Jesucristo y compararlo con la apoteosis de los césares romanos ¿por qué? Bueno, habida cuenta de la gran cultura del autor sagrado san Lucas y el tiempo que le tocó vivir perfectamente puedo tomar algunos paralelos para explicar mejor el texto bíblico y acercarme al vuelo a las estrellas de Escipión en sueños (cf. Cic. Rep. 9,2-26) y a César después de la cremación (cf. Suet. Caes. 88). Esto no tiene nada de malo si luego, éticamente, vuelvo al texto bíblico (Hch 1,9-11), invocando la intención del hagiógrafo y valiéndome de la crítica literaria puedo decir que los galileos esperaban la prueba de la ascensión (en comparación con la apoteosis romana un águila surcando el cielo o un cometa), nada de esto sucede y los ángeles los invitan a no permanecer mirando al cielo ¿dónde está la prueba de la ascensión de Jesús? ¿en el cielo? ¡no! está en la Tierra, en los Hechos de los Apóstoles y la Vida de la Iglesia, entonces no esperemos pruebas celestiales sino que pongámonos a servir con la fuerza del Espíritu Santo hasta que Él vuelva ¡esto es edificante!
Pero estos magos de la exégesis, en lugar de volver a la Sagrada Escritura, se quedan en los textos paralelos, que pasan a constituir “la Palabra de Dios” para ellos y tiran una “bomba transgresora” para ganar dinero y prestigio rápido: ¿realmente ascendió Jesús? ¡La trama secreta de la ascensión! El enigma de… apelando a la imaginación y a la mentalidad posmodernista. Ese es, básicamente, el truco. Lo demostré a partir de una elaboración cualquiera que se me ocurrió, sin intención de dañar a nadie en lo personal, porque los profetas denuncian el pecado para beneficio espiritual de los pecadores si se arrepienten (cf. Lucas 16, 13-14).
Es importante el estudio y la espiritualidad, la razón y la fe. No podemos caer en extremismos y menos para sacar una tajada de beneficios personales egoístas. Sin duda, el Pueblo de Dios merece una buena formación actualizada y no una deformación basada en novedades contradictorias, que no guardan relación con la analogía de la fe cristiana.
Ni fundamentalismo vetusto que crea un universo artificial alrededor de un monstruo emocional para drogar al pueblo con poesías fantasiosas, alimentando al fanatismo; ni racionalismo alejado del Espíritu que tampoco aporta nada al mundo, porque termina siendo más de lo mismo y al final, tan fantasioso y paranoico como el fundamentalismo popular y fanático. Por todo eso, la invitación es a proceder con discernimiento para dar buenos frutos. (PCD).
“No extingan la acción del Espíritu; no desprecien las profecías; examínenlo todo y quédense con lo bueno. Cuídense del mal en todas sus formas” (I Tesalonicenses 5, 19-22).
Mauricio Shara
(Basado en un artículo de Prensa Cristiana Digital 19 (2009) 10)
Mauricio Shara
(Basado en un artículo de Prensa Cristiana Digital 19 (2009) 10)
(Como regalito algunas escenas de la película de Mel Gibson):
Totalmente de acuerdo con este Art., solo agrega-
ResponderEliminargaria que esta ficcion fatalista es mas que nada
para snobs y para los que creen que atacando a
la iglesia son Hi o bian...!
Las ansias de poder y el afan por el dinero hacen
cometer grandes atrosidades y esta lamentablemen-
te es una de ellas !
ETELVINA