En Tafí Viejo todos hablan del episodio que, el último miércoles, enfrentó al intendente Javier Pucharras con la Iglesia Católica. Ese día, durante los actos por la tradicional fiesta de san Antonio, patrono de la ciudad, se generó una fuerte polémica. El primero en hablar fue el párroco Julio Barbarino. En su homilía, el prelado se refirió a los problemas que aquejan a la sociedad, con especial énfasis en loque sucede en ese municipio. También apuntó contra el avance de las drogas, el alcoholismo y la prostitución, además de referirse a la falta de trabajo entre los taficeños. Luego del acto religioso, el jefe municipal tomó el micrófono y en su discurso frente a la comunidad se despachó contra la Iglesia Católica, visiblemente molesto. Entre sus diatribas se refirió a la polémica por el Banco Ambrosiano y la presunta corrupción en el Vaticano (?¡).
Tras la controversia, surgieron las críticas hacia Pucharras. "Debemos comprender que, así como no toleró oír voces críticas, tampoco escuchó a los cientos de taficeños que con estruendosos silbidos pedíamos que se llamara a silencio y diera continuidad a los festejos", repudió el radical Javier Ernesto Guardia Bosñak. Otro dirigente, José "Coqui" Domínguez cuestionó la reacción del intendente. "Atacar la Iglesia para "defendernos" es propio de quienes aún no han entendido que la autoridad es servicio y que, en consecuencia, debemos hacernos cargo de eso", condenó.
Texto completo:
Cuando no se tienen argumentos para atacar a la
ResponderEliminarIglesia y a las autoridades de la misma, se re-
curre, como en este caso, a viejas historias que
no han sido desconocidas para nadie; en vez de
ver lo bueno que hace la Iglesia...! Triste pero
real.!
ETELVINA