Los casos de abuso sexual a menores ya le costaron a la Iglesia Católica a nivel internacional más de dos mil millones de dólares, informaron ayer los estadounidenses Michael Bemi y Patricia Neal en el simposio organizado por el Vaticano para afrontar los escándalos de clérigos pederastas. Michael Bemi, del National Catholic Risk Retention Group, de Vermont, y Patricia Neal, directora del programa de protección de niños Virtus, manifestaron en la tercera jornada del simposio, que se celebra en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, que esos casos han tenido “profundas consecuencias negativas” para la Iglesia Católica, “cuyo corazón han perforado”.
Los dos expertos precisaron que no hay valoración que pueda hacerse sobre las miles de víctimas, niños y adultos vulnerables, cuyas vidas cambiaron para siempre; que simplemente analizaron los daños causados a la Iglesia por estos escándalos, que nunca se conocerán en su totalidad. Los dos mil millones de dólares se pagaron en los acuerdos a los que se llegó con las víctimas, en juicios, asesoramientos legales, terapias y seguimiento de los agresores, entre otras.
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Si a la llamada “Iglesia Católica” le hicieran pagar por todos los crímenes que comete mundialmente, no les alcanzaría todo su dinero. Durante siglos, el Vaticano ha violado a los inocentes alrededor del mundo y nunca ha rendido cuentas por sus crímenes. La Iglesia se mantiene por encima de la ley y afirma que el mismo Papa Benedicto no puede ser juzgado por su delito de obstrucción a la justicia, y encubrir y ayudar a violadores de niños. La Iglesia tiene que entregar a todo su clero, empleados y funcionarios que hicieron daño a niños, o ayudaron, o protegieron a los perpetradores, así como toda la evidencia de sus crímenes, sin condiciones. Todos aquellos en la Iglesia, incluyendo al Papa, que han dañado o dañan a los niños, o por encubrimiento y complicidad del daño, tienen que ser arrestados y procesados en cortes seculares, y no pueden protegerse bajo ninguna forma de inmunidad para evitar juicio
ResponderEliminarEl comentario anterior es sumamente ideológico contra la Iglesia sin tener pruebas positivas de lo que se afirma. Si no fuera por la Iglesia católica no sabr+íamos un carajo ni de la Biblia ni de Jesucristo. ANDÁAAAAAA!!!!!!!!!!!!
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