Asia Bibi está sometida a condiciones infrahumanas en la cárcel, pero perdona a sus verdugos

Asia Bibi, la mujer cristiana injustamente condenada a muerte por blasfemia, en prisión desde el 9 de junio de 2010, corre el riesgo de enfermarse mentalmente: sus condiciones físicas están en degradación continua y necesita urgentemente un "un chequeo médico completo". Sin embargo, su moral, en los raros momentos de lucidez, sigue siendo alta y Asia, ha dicho que "ha perdonado a sus verdugos": Esto es lo que afirma a Fides Haroon Barkat Masih, Director Internacional de la "Fundación Masihi" (MF), la organización no gubernamental protege los derechos de los cristianos en Pakistán y que se encarga jurídica y materialmente de la mujer. Una delegación internacional de la "Fundación Masihi" ha encontrado a Asia Bibi ayer, 19 de diciembre de 2011, en la prisión del Distrito de Sheikpura, donde se encuentra desde hace más de un año para determinar su condición, llevarla una palabra de esperanza y buenos deseos para la Navidad, mientras que el proceso de apelación, después de haber sido condenada en primera instancia, se encuentra pendiente ante el Tribunal Superior de Lahore.

En un comunicado difundido por la "Fundación Masihi" después de visitar la cárcel y enviado a la Agencia Fides, se afirma que "debido a su aislamiento, Asia Bibi, de 46 años, ha envejecido considerablemente, tiene una tez pálida, parece muy frágil, incluso no puede estar sola". Asia fue escoltada por dos mujeres del personal de guardia.

"En el momento de la reunión, sus ojos se perdieron en el vacío, no entendía lo que estaba pasando, estaba completamente confundida y sorprendida. Durante toda la conversación - más de 2 horas y 20 minutos - sus pensamientos estaban a la deriva" informa con preocupación la Fundación Masihi. "Ha respondido a los estímulos con una mezcla de emociones, riendo, llorando y permaneciendo en silencio durante largos períodos de tiempo".

"Durante los primeros 10 minutos - continúa el texto enviado a Fides - Asia no ha sido capaz de reaccionar y no entendía si éramos amigos o enemigos. Dijo que no había nadie que se preocupaba por ella, tenía miedo y parecía que tenía frío y estaba nerviosa. No podía mantener los ojos fijos en un punto o en una persona. La ofrecimos agua e incluso parecía tener miedo del agua ". Sus condiciones de higiene personal eran terribles: Asia no se baña desde hace más de dos meses.

La Delegación de la Fundación Masihi ha asegurado proporcionarla asistencia legal para mantener un alto nivel. Asia, con voz baja y humilde, ha repetido a los miembros de la FM que "sólo quiere volver con su familia", y que continúa a rezar y ayunar. La mujer pide a los cristianos en el mundo "seguir rezando por ella". Cuando se le preguntó cómo pasa el tiempo, Asia, dijo: "He perdido la noción del tiempo. No tengo ni idea de la hora, del mes, una estación. El único día que recuerdo es que 9 de junio, el día más oscuro de mi vida cuando me arrestaron. El comienzo de una pesadilla para mí y mi familia".

Preguntado sobre el perdón, Asia, dijo: "Primero he vivido la frustración, la ira, la agresión, luego, gracias a la fe cristiana, después de haber ayunado y rezado, las cosas han cambiado en mí: he perdonado a los que me acusaron de blasfemia. Este es un capítulo en mi vida que quiero olvidar", señalando que "muchos otros cristianos son acusados injustamente como yo". Mientras que la delegación estaba a punto de salir, con miedo, Asia gritó entre lágrimas, "¿Cuándo seré puesta en libertad?".

"Es una pregunta que hacemos al gobierno de Pakistán, a la comunidad internacional, a la Iglesia universal", dijo en una entrevista con la Agencia Fides Haroon Barkat Masih. "Si Asia continúa aislada es probable que enferme mental y esto pueda comprometer seriamente su equilibrio psicológico. Exigimos que las autoridades permitan de inmediato a un equipo de médicos visitarla y medicarla", continuó el Director de la FM. "Recientemente, el Papa Benedicto XVI visitó a los presos de una cárcel italiana: Creemos que, en su gesto, simbólicamente, ha incluido a todos los prisioneros en el mundo y también a  Asia Bibi, que pasará una triste Navidad, en la soledad de una celda. Hacemos un llamado a todos los cristianos de todo el mundo para recordar al Señor a Asia Bibi, la víspera de Navidad, y elevar una oración por ella. "

Fuente: Agencia Fides