En Zimbabwe el gobierno tiene la "receta" de las republiquetas populistas: elecciones manipuladas, censura y control autoritario sobre la población. Cuenta con el apoyo de Venezuela

Elecciones manipuladas, libertad de expresión y de prensa limitada, censura de los medios de comunicación o intimidación e intentos de controlar las actividades de la sociedad civil y las organizaciones no gubernamentales siguen violando los derechos humanos en muchos países del mundo. En Zimbabwe la situación es particularmente grave. De acuerdo con el informe de 2011 de las Naciones Unidas para la Protección de los Derechos Humanos, con respecto al año anterior, los abusos en el país han sido causados por los partidarios de la Unión Nacional Africana de Zimbabwe - Frente Patriótico (ZANU-PF), que siguen atacando a los miembros de otros partidos políticos, a los periodistas y activistas de la sociedad civil con la violencia, las detenciones y malos tratos físicos que a menudo conducen a la muerte.

A pesar de los muchos llamamientos del Presidente Mugabe y de otros dirigentes para detener la violencia política, las fuerzas de seguridad siguen actuando con impunidad. Grupos de delincuentes bajo la bandera de la ZANU-PF han invadido propiedades privadas, demolido casas y mercados pequeños. Por el bien de la nación, es esencial que todos los actores políticos y del sector de la seguridad sigan las directrices del Presidente y suspendan de inmediato estas acciones violentas, además de ser igualmente importante que el Presidente Mugabe insista en que el gobierno imponga su mando. Los Estados Unidos se ha comprometido en la promoción de los derechos universales, la creación de asociaciones que promuevan Zimbabwe y ayuden a hombres, mujeres y niños a vivir en condiciones dignas, y que los derechos humanos sean respetados y protegidos.

Fuente: Agencia Fides